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Adaptabilidad y Competitividad

España se encuentra en un punto crucial en su camino hacia la digitalización. Los últimos meses han sido testigos de avances significativos en el ámbito de los datos y la tecnología, sentando las bases para un futuro lleno de oportunidades y desafíos.

Durante el último tiempo, muchas empresas han trabajado arduamente en la implementación de soluciones digitales para mejorar su competitividad. Desde la adopción de sistemas de gestión basados en la nube hasta la automatización de procesos clave, las organizaciones han estado sembrando las semillas de la innovación. Estos esfuerzos se traducirán en una mayor agilidad operativa y en la creación de experiencias de cliente más satisfactorias y personalizadas.

La cosecha de datos masivos

En términos de producción y recolección de datos, en un ecosistema con más personas participando en actividades digitales y utilizando servicios en línea, la cantidad de información recolectada ha alcanzado niveles sin precedentes. Este torrente de datos ofrece un valioso recurso para las empresas, permitiéndo tomar decisiones más informadas y diseñar estrategias más efectivas. 

Las empresas españolas están invirtiendo más que nunca en la implementación de soluciones digitales, y los números hablan por sí mismos. Según datos del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, más del 65% de las empresas han aumentado sus inversiones en transformación digital. Este impulso se traduce en un aumento del 30% en la eficiencia operativa, y se espera que en los próximos tres meses, el 40% de las empresas implemente tecnologías de automatización avanzada para agilizar sus procesos.

Además, las tecnologías IoT eclosionan aún más a partir de la llegada del 5G, impulsando el uso masivo de servicios en la nube, en las ciudades, en la industria y en el hogar. Por otra parte, este incremento en la generación de datos en combinación con los sistemas de IA, irrumpen la actualidad consiguiendo alcanzar un conocimiento más profundo de las circunstancias actuales y actuar con la mayor celeridad. Los sistemas basados en big data, IA y RPA (Robotic Process Automation) puestos en marcha por algunas administraciones para hacer frente a la gestión de la crisis sanitaria y gestionar las peticiones masivas de ayudas a pymes y autónomos, también así lo demuestran.

Y tras un crecimiento exponencial en términos de generación de datos, según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), el tráfico de datos móviles ha aumentado en un 40%. Este aumento en la actividad digital ha creado un reservorio invaluable de información que las empresas están ansiosas por aprovechar. Se espera que durante el próximo trimestre, el análisis de datos sea responsable de un aumento estimado del 25% en la toma de decisiones informadas por parte de las organizaciones.

Habilidades camaleónicas 

Adaptabilidad, una de las principales capacidades para mantener la competitividad; cualquiera que sea la compañía y su sector, hay una creciente divergencia entre aquellas que pueden usar la tecnología y aquellas que no.

Imagina que tienes un equipo de personas muy capacitadas, mucha información a tu disposición y sabes cómo usar programas avanzados en tu empresa. Si además cambias la forma en que la gente utiliza esa información, tienes la oportunidad de aumentar la cantidad de trabajo que haces y superar a otras empresas en tu industria. Esto te hace más competitivo. Aunque algunas empresas también podrían obtener la misma tecnología, no garantiza automáticamente el éxito. Lo que realmente marca la diferencia es cómo aprendes a aprovecharla al máximo.

Jeff Bezos, el fundador y presidente ejecutivo de Amazon, una de las compañías tecnológicas más importantes del planeta declara: “La velocidad es importante en los negocios, de ahí que te recomiende tomar decisiones rápidas”

La digitalización debe actuar como catalizador de la innovación empresarial, al permitir el desarrollo de nuevos productos y modelos de negocio; la situación supone un cambio de paradigma de la formación de estudiantes y trabajadores hacia lo que se ha llamado aprendizaje continuo (lifelong learning) o formación permanente.

El cambio de paradigma es una realidad global, una nueva cultura empresarial para ser capaces de concebir los cambios no como limitaciones, sino como oportunidades de prosperidad y desarrollo.

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